Blog Home

Ahora se puede ver en televisión pública y en YouTube el documental más reciente del Académico Titular del Instituto Cato Johan Norberg, Corporate Welfare: Where's the Outrage? El documental presenta historias personales de los efectos de las exenciones tributarias, subsidios, regulaciones estatales, y rescates –todos usualmente utilizados para ayudar a las empresas grandes. Norberg se adentra en el sistema estadounidense de subsidios agrícolas, de financiamiento de incremento de impuestos (TIF), de los subsidios para las grandes empresas petroleras, políticas estatales, y créditos tributarios para las grandes empresas, y ofrece una perspectiva de la crisis financiera de 2008 desde el punto de vista de un banquero atrapado en el medio del caos. El programa recorre EE.UU. para hablar con individuos cuyas vidas y sustento han sido directamente perjudicados por los excesos del bienestar corporativo

Revise su estación local de PBS o busque su ciudad aquí si reside en EE.UU.

O puede verlo en YouTube

Creciendo en la década de 1970 y 1980, mi show de televisión favorito era (y sigue siendo hasta el día de hoy) M*A*S*H. No solo es chistosa y creativa, también es emocionalmente emotiva y moralmente educativa. Creo que es un show que los libertarios y otros liberales clásicos –ya sea que estén a la izquierda o derecha del espectro político– deberían disfrutarla y gozarla especialmente. 

Cuando la serie estaba siendo producida, e incluso hoy, sus críticos decían que M*A*S*H era “izquierdosa” y “progresista” (particularmente en las temporadas posteriores). De hecho, el liberalismo del show es de la variedad liberal clásica, repetidas veces presentando los peligros del poder estatal, los beneficios de los mercados y la propiedad privada, y una profunda apreciación del individuo y las libertades civiles. Y, por supuesto, regularmente muestra la miseria de la guerra y la crueldad del servicio militar obligatorio

Considere este fragmento de diálodo del conscripto Max Klinger (representado por Jamie Farr) sobre por qué sigue tratando de ser dado de baja por las Fuerzas Armadas:

¿Por qué? hay...hay muchas razones.
Asumo que la muerte encabeza la lista. No quiero morir.
Y no quiero ver a otras personas mientras mueren.
Y no quiero que me digan dónde pararme mientras me pasa a mi. 
Y no quiero que me digan que se lo haga a otra persona.
Y no lo voy a hacer. Punto. Eso es. Me voy a salir.

He escrito un ensayo acerca del liberalismo clásico de M*A*S*H para la organización Liberty Fund. Aparecerá como una serie de posteos breves en su blog popular Econlog. El primero de estos se encuentra aquí.

(Ese sitio de publicación es altamente adecuado; la estrella de la serie Wayne Rogers, quien representó a “Trapper” John McIntyre, asistió a seminarios de Liberty Fund). 

Si nunca ha visto “la mejor media hora en televisión”, ahora es un gran momento para descubrirla. Y si es un antiguo fan, tendrá todavía más razones para apreciar las hazañas del Hospital Móvil Quirúrgico de las Fuerzas Armadas No. 4077.

Conforme escribo este post, el ganador de la elección presidencial de 2020 todavía está por ser determinado. Pero la guerra contra las drogas fue un claro perdedor el día de las elecciones. Los electores en Arizona, Montana, Nueva Jersey y Dakota del Sur aprobaron en las urnas propuestas que legalizaban la posesión y uso recreativo de drogas. Los electores también legalizaron la marihuana para propósitos medicinales en Mississippi y mediante una propuesta adicional en Dakota del Sur. 

Los electores de Oregon le dieron un golpe todavía más duro a la guerra contra las drogas cuando aprobaron la Medida 110, la cual despenaliza la posesión de todas las drogas dentro del territorio del estado. Ojalá otros estados pronto seguirán el ejemplo de Oregon.

Escribí acerca de la despenalización de las drogas en Oregon aquí

EE.UU. obtiene la posición No. 6 de entre 162 países y territorios incluidos en el Informe Anual de Libertad Económica en el Mundo 2020, co-publicado en EE.UU. por el Instituto Cato y el Instituto Fraser basado en Canadá. El reporte mide hasta qué grado las políticas e instituciones de los países respaldan la libertad económica.

EE.UU. ha caído una posición en el ranking de 2018, el año más reciente para el cual hubo disponibilidad de datos comparables a nivel internacional. En América Latina, continúa a la cabeza Chile, mejorando su posición desde la 17 en 2017 hacia la 14 en 2018. 

Hong Kong y Singapur nuevamente lideran el índice, continuando su récord de ubicarse en la primera y segunda posición, respectivamente. Nueva Zelanda, Suiza, Australia, EE.UU., Mauricio, Georgia, Canadá e Irlanda se encuentran en el top 10. Dentro de Latinoamérica, lideran el ranking Chile (14), Panamá (26), Perú (29), Guatemala (35) y Costa Rica (39). 

Los autores del reporte explican que “Las calificaciones del reporte de este año están basadas en datos de 2018. Por lo tanto, la calificación de Hong Kong no está afectada por la propuesta en 2019 de transferir ciertos casos legales al continente ni por las protestas y algunas veces la represión brutal que se dio; ni por la nueva ley de seguridad impuesta en 2020 por el gobierno chino…”

Los países con la calificación más baja son Irak, la República del Congo, Egipto, Siria, la República Democrática del Congo, Angola, Algeria, Sudán, Libia, y, finalmente, Venezuela. Algunos países con regímenes despóticos como Corea del Norte y Cuba no pueden ser analizados debido a la falta de datos. En América Latina, los países con la calificación más baja son Brasil (105), Ecuador (110), Bolivia (116), Argentina (144) y Venezuela (162).

El informe de este año viene acompañado de un estudio elaborado por Niclas Berggren y Therese Nilsson que analiza la relación entre la libertad económica y la confianza y la tolerancia. Los autores concluyen que “En los países económicamente más libres con un sólido Estado de Derecho, las personas suelen tener más confianza en y tolerar más a los homosexuales y las personas de otras razas, mientras que la relación con el antisemitismo es más complicada. Mientras que un Estado de Derecho más sólido está asociado con actitudes menos hostiles hacia los judíos, una economía más abierta está asociada con un mayor nivel de antisemitismo”. Los autores agregan que para quienes estén interesados en discernir qué determina el nivel de confianza y tolerancia en distintas sociedades, “vale la pena notar que la libertad económica es un factor importante que debe ser incluido en los estudios empíricos”.

Con su imposición de una ley de seguridad nacional sobre Hong Kong, Pekín viola la autonomía del territorio a un grado que fundamentalmente subvierte el sistema liberal que hizo de Hong Kong una de las historias de éxito más destacadas del mundo. El sistema de Hong Kong —basado en un Estado de Derecho sólido y un alto grado de libertades económicas, personales y civiles tales como la libertad de expresión y de asociación— permitió a sus ciudadanos surgir de una pobreza generalizada hacia un nivel de prosperidad que excede incluso aquel de su otrora colonizadora, Gran Bretaña. Este es el sistema que también ayudó a inspirar las reformas de mercado en la China continental, conduciendo a que durante las últimas cuatro décadas se hayan logrado extraordinarios avances en el bienestar humano allí también.

La represión de China sobre Hong Kong refleja el giro problemático del Partido Comunista hacia el nacionalismo y el fortalecimiento del autoritarismo durante  la presidencia de Xi Jinping. Como bastión de la libertad humana, el sistema de Hong Kong se volvió cada vez más incompatible, e incluso amenazante, para una China cada vez más agresiva. La nueva ley de seguridad nacional disminuirá todos los aspectos de la libertad en Hong Kong. Debilitará el Estado de Derecho, aumentará la auto-censura por parte de la prensa y otros, restringirá a la sociedad civil, aumentará la arbitrariedad en la gobernanza local, y politizará las decisiones empresariales, incluso aquellas acerca de dónde y con quién invertir y a qué caridades o causas respaldar. En pocas palabras, la nueva medida reducirá las libertades económicas, personales y civiles en Hong Kong y pone un fin definitivo a la ciudad como un símbolo de libertad humana.

Las noticias económicas son pésimas con reportes diarios de cierres, despidos y restricciones. Hasta ahora, más de 16 millones de estadounidenses se han quedado sin trabajo y hemos entrado en la peor recesión desde la Gran Depresión de la década de 1930.

Sin embargo, en medio de la tristeza hay informes frecuentes de empresas y empresarios que avanzan en la batalla contra la COVID-19. El sector privado está compitiendo para producir vacunas, tratamientos, pruebas y suministros médicos para vencer la pandemia.

Aquí hay algunos desarrollos recientes:

  • Formlabs está produciendo pruebas de COVID-19 en hisopos con impresión 3-D, pasando del prototipo a la producción en semanas. Mientras tanto, Prisma Health y Johnson & Johnson están utilizando la impresión en 3-D para producir divisores de ventiladores, permitiendo que dos pacientes usen una misma máquina.
  • Walgreens estará expandiendo esta semana las pruebas de detección del virus drive-thru en siete estados.
  • Abbot Labs inventó un kit de prueba de COVID-19 que produce resultados en entre 5 a 13 minutos. La compañía ha enviado 190.000 kits hasta ahora. Cepheid y Mesa Biotech también han desarrollado pruebas que producen resultados bastante rápido.
  • Las compañías de robótica han creado máquinas que circulan por hospitales y otras instalaciones que rocían luz ultravioleta (UVC) para matar los virus en el aire y en las superficies.
  • Gilead Sciences ha aumentado la producción de remdesivir, su medicamento experimental para el coronavirus, y actualmente tiene 1,5 millones de dosis que proporciona de forma gratuita.
  • Brooks Brothers está fabricando máscaras quirúrgicas y aumentando la producción a 150.000 máscaras por día desde fábricas en tres estados.
  • Georgia Tech se ha asociado con Coca Cola y otras compañías para producir más de 50.000 protectores faciales de plástico.
  • Eli Lilly se ha asociado con AbCellera para aislar anticuerpos de supervivientes y desarrollar un tratamiento.
  • Regeneron Pharmaceuticals está desarrollando un cóctel de anticuerpos para tratar la COVID-19. 
  • Johnson & Johnson está planeando comenzar sus ensayos clínicos en septiembre para una posible vacuna.
  • Moderna comenzó pruebas en humanos en marzo y espera desarrollar una vacuna basada en su metodología avanzada de ARN mensajero.
  • Entos Pharmaceuticals está trabajando para desarrollar una vacuna basada en ADN. Dicha vacuna sería más barata y fácil de escalar que vacunas ordinarias.
  • OyaGen está realizando estudios sobre la seguridad y la eficacia de un medicamento antiviral que puede ser efectivo contra la COVID-19.
  • Airways Therapeutics, una startup especializada en enfermedades pulmonares, está trabajando para reinventar una terapia que reduzca la inflamación pulmonar para tratar la COVID-19.
  • General Motors está construyendo 30.000 ventiladores, mientras que Tesla y Ford también apuntan a producir estas máquinas.
  • Estudiantes de la Universidad de Rice desarrollaron una alternativa de ventiladores para ayudar a los pacientes cuando los ventiladores regulares no estén disponibles. Los dispositivos son baratos de construir y sus planos están gratis en línea.
  • En las últimas semanas, la telemedicina ha estado en auge después de desregulación del gobierno. Compañías independientes, como Teladoc y Doctor on Demand, están agregando médicos, y grandes empresas de tecnología como Apple, Google y Microsoft están entrando en el negocio. 
  • Hospitales, centros de atención urgente y redes de salud se han trasladado rápidamente a la telemedicina. Los proveedores de salud mental ahora están en línea. AT&T se está asociando con VitalCare para ofrecer gratuitamente telemedicina a los hospitales.

Discuto otros avances comerciales contra la COVID-19 aquí. La Business Roundtable enumera las formas en que sus miembros contribuyen aquí. BIO analiza los medicamentos que sus miembros están desarrollando aquí. La Cámara de Comercio describe los esfuerzos de las pequeñas empresas para combatir el virus aquí. PhRMA cuenta las docenas de terapias y vacunas en desarrollo contra la COVID-19 en la tabla a continuación y obtenidas aquí.

s
David Kemp ayudó en la investigación de este blog.

Publicado originalmente en Cato at Liberty (EE.UU.) el 10 de abril de 2020.

De acuerdo con nuevos reportes, el Secretario del Tesoro Steven Mnuchin, indicó que el gobierno de EE.UU. tendrá una participación accionaria en las aerolíneas, como condición necesaria para el rescate de $58 mil millones de la industria que está contemplado en el paquete de apoyos por COVID-19 de $2 billones (“trillions” en inglés).

Desde una perspectiva, la participación en el capital puede parecer apropiada; si los accionistas de las aerolíneas obtienen una gran transferencia del gobierno, ¿no se les debe pagar a los contribuyentes (por venderles acciones apreciadas) una vez que las aerolíneas se recuperen?

Sin embargo, desde otra perspectiva, la participación accionaria es preocupante; convierte al gobierno en propietario directo de una industria privada. El capitalismo de compadres y las regulaciones dudosas seguramente vendrían después.

La forma de conciliar estas preocupaciones es evitando el rescate.

Sí, las aerolíneas pueden reclamar, con cierta razón, que el gobierno contribuyó a su desgracia (por ejemplo, cancelando los viajes a otros países).

Pero muchas industrias pueden tener argumentos similares. Establecer una compensación adecuada para todos los sectores sería difícil, costoso, y probablemente generaría enormes desigualdades en función de qué industrias tienen mayor influencia política.

¿Por qué no evitar todos estos problemas y riesgos tan desordenados, y dejar que los contribuyentes se queden con su dinero?

Publicado originalmente en Cato At Liberty (EE.UU.) el 27 de marzo de 2020.

Categorias

Autores

Archivos