Plaza Che Guevara en la ciudad de Rosario (Argentina)
Esta semana me llamó la atención un artículo en la revista británica The Economist destacando el pedido de la Fundación Bases (Rosario) de remover los monumentos y homenajes hacia Ernesto “Che” Guevara en la ciudad de Rosario. No podría estar más de acuerdo. El “Che” Guevara no fue nada más ni nada menos que un asesino, homofóbico y racista que, además, nada hizo por la ciudad que le rinde homenaje. Por el contrario, sí ayudó a construir la dictadura cubana que a la fecha se ha cobrado más de 7.000 vidas y que sigue compulsivamente encarcelando a quien piensa distinto. Si hay alguien que merece homenaje, son las personas que han tenido la desdicha de perecer bajo las balas de Guevara. “Un revolucionario debe convertirse en una fría máquina de matar motivado por odio puro” decía el “Che”. Ningún asesino es digno de un homenaje.
Este artículo fue originalmente publicado en La Capital (Rosario) el 4 de agosto de 2017.