Venezuela: El silencio es complicidad
Cristina López G. dice que Rodrigo Diamanti, fundador de la organización Un Mundo Sin Mordaza, "Como el agujerito en un buque, se volvió incómodo para la dictadura de Maduro y en obvia violación a cualquier carta de derechos humanos, fue detenido sin haber cometido más delito que el de ejercer su ciudadanía de manera incansable".