New York Community Bancorp: ¿se avecina otra crisis bancaria en Estados Unidos?
Juan Ramón Rallo explica que el desplome de la demanda de oficinas en Estados Unidos por la pandemia y la subida de tipos de interés está provocando una oleada de impagos hipotecarios, lo que supone mayores pérdidas para los bancos.
Por Juan Ramón Rallo
El New York Community Bancorp (NYCB) es el trigésimo quinto mayor banco de Estados Unidos y, desde el pasado 30 de enero, su futuro está en el aire. Fue en ese momento cuando publicó sus resultados correspondientes al cuarto trimestre de 2023 y no fueron en absoluto positivos. La entidad perdió casi 260 millones de dólares, algo completamente atípico en su historia y del todo inesperado.
Como consecuencia de ese mazazo, los bonos del banco fueron degradados a la categoría de "bono basura" y su cotización bursátil se ha desplomado casi un 70%: el 30 de enero cada acción tenía un valor de 10,4 dólares y, en la actualidad, ronda los 3,3 dólares. Pero, ¿a qué se han debido tales pérdidas? Por un lado, el New York Community Bancorp es un banco que concentra la mayor parte de su actividad prestamista en las hipotecas tanto residencial como comerciales del área de Nueva York: pues bien, a raíz de la pandemia, la demanda de oficinas en el conjunto de Estados Unidos se ha desplomado (en la actualidad, el 20% de las oficinas del país están vacías, el dato más alto desde que tenemos registros), lo que está espoleando una oleada de impagos hipotecarios (la morosidad en las hipotecas comerciales se ha disparado en 2023 y ya roza el 7% del total).
Por si lo anterior fuera poco, la subida de tipos de interés ha secado la demanda de este tipo de inmuebles, de modo que su precio está cayendo a ritmos interanuales del 10%. Más impagos y menor valor de la garantía suponen mayores pérdidas para los bancos afectados. Pero es que, por otro lado, la ya mentada subida de tipos de interés también está encareciendo el coste del pasivo de los bancos, lo que todavía tensiona más su cuenta de resultados. Se trata de una tormenta, similar a la que ya vivimos hace un año con la banca regional del país, que podría seguir extendiéndose por el sistema financiero estadounidense si es que la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed, por sus siglas en inglés) no baja los tipos de interés para comenzar a relajar las tensiones que se van acumulando.
Este artículo fue publicado originalmente en La Razón (España) el 12 de marzo de 2024.