Los pacientes estadounidenses deberían tener acceso a medicamentos y dispositivos que benefician a pacientes de otros países desarrollados
Jeffrey A. Singer considera que la aprobación recíproca de medicamentos y dispositivos médicos no debería depender de una “necesidad insatisfecha”.
Swiss Medtech, una asociación comercial que representa a la industria de la tecnología médica, emitió un comunicado de prensa el 28 de noviembre elogiando al Parlamento suizo por promulgar una legislación que permite a los proveedores de atención médica y a los pacientes suizos acceder a dispositivos médicos aprobados por la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) de EE.UU. Hasta ahora, el gobierno suizo solo permitía que los pacientes y los médicos accedieran a dispositivos que tuvieran la marca CE, que indica que el dispositivo cumple con los estándares de la Unión Europea y que esta lo aprueba para su comercialización entre los estados miembros. La acción del Parlamento suizo debería ampliar el acceso y aumentar la competencia de precios de los dispositivos médicos.
Australia comenzó a permitir que pacientes y médicos accedan a dispositivos médicos aprobados por la FDA en 2018 y les ha permitido usar dispositivos aprobados por la UE durante varios años. Israel permite dispositivos aprobados en EE.UU., la UE, Australia y Canadá.
Los legisladores estadounidenses han propuesto una legislación que permite a los pacientes y proveedores de atención médica estadounidenses acceder a medicamentos y/o dispositivos aprobados en otros países desarrollados. Los formuladores de políticas se refieren de manera inapropiada a la propuesta como “reciprocidad”, pero la reforma no depende de que los otros países permitan a sus residentes usar medicamentos o dispositivos aprobados por la FDA a cambio.
En testimonio ante el Comité Económico Conjunto en septiembre de 2020, declaré:
El Congreso debería aprobar leyes que otorguen aprobación recíproca a medicamentos y dispositivos médicos (lo que incluye pruebas) en países similares. La aprobación recíproca ya existe entre los estados de la Unión Europea más Islandia, Liechtenstein y Noruega. En julio de 2019, el Senador Ted Cruz (Republicano de Texas) presentó la S.2161, Ley de Reciprocidad Garantiza el Uso Optimizado del Tratamiento para Salvar Vidas (RESULT, por sus siglas en inglés), que permitiría la comercialización de medicamentos aprobados en ciertos países, pero aún no aprobados por la FDA, si “existe una necesidad insatisfecha”. Si bien este es un paso en la dirección correcta, en interés de promover la competencia y la elección del consumidor, la aprobación recíproca no debe depender de una necesidad no satisfecha.
En nuestro trabajo académico Drug Reformation, publicado ese mismo año, junto a Michael F. Cannon escribimos:
… como mínimo, el Congreso debería eliminar la capacidad de la FDA para restringir el discurso veraz de los fabricantes sobre sus productos y permitir que los consumidores estadounidenses compren medicamentos que hayan obtenido aprobación de las agencias de certificación designadas, incluidos los organismos reguladores extranjeros. Según un estudio, reconocer las aprobaciones de medicamentos por parte de organismos reguladores en Canadá y Europa entre 2000 y 2010 habría dado a los consumidores estadounidenses un acceso más rápido a 37 medicamentos “novedosos” para los cuales “ningún otro medicamento recetado aprobado por la FDA tenía el mismo mecanismo de acción”, incluidos 10 medicamentos que tratan principalmente enfermedades huérfanas “para las cuales no había terapia alternativa disponible en EE.UU.”. Dicho reconocimiento habría permitido a los consumidores estadounidenses acceder a esos medicamentos una media de 13,6 meses antes.
Si los miembros del Congreso entrante se toman en serio aumentar el acceso a la atención médica y reducir los costos de esta, deberían, como mínimo, aprobar una ley que permita la “reciprocidad” de medicamentos y dispositivos con otras naciones desarrolladas.
Este artículo fue publicado originalmente en Cato At Liberty (EE.UU.) el 29 de noviembre de 2022.