¿Quiere pagar más intereses en sus deudas?
Manuel Hinds dice: "A la gente ya se le olvidó pero las tasas de interés eran mucho más altas en colones que en dólares en El Salvador, y todas las tasas bajaron con la dolarización. La mayor parte de la gente no hubiera podido comprar casa con las tasas anteriores, y no podrían pagarlas si esas tasas regresaran".
Por Manuel Hinds
¿Ha oído usted decir que si no estuviéramos dolarizados el Banco Central de El Salvador podría jugar con las tasas de interés para bajarlas? Muestre usted la gráfica 1 a los que le dicen esto y pregúnteles: ¿por qué lo dicen si, como es obvio en la gráfica, los bancos centrales de América Latina no logran bajarlas al nivel de las tasas de los países dolarizados? Note usted que la diferencia es muy grande. En septiembre era de 10 puntos y ha llegado a ser de 30 puntos (en agosto de 2002).
Fuente de datos básicos: International Financial Statistics del FMI.
¿Será que los banqueros centrales de América Latina son muy ineptos, o será que hay razones fundamentales por las que las tasas en monedas locales son siempre más altas que en dólares? La respuesta es la segunda: las tasas de interés en las monedas locales son más altas porque dichas monedas siempre tienen un riesgo de devaluación.
Mire la gráfica 2 para ver esto claro usando datos en los que los bancos reciben depósitos y dan créditos en dólares y moneda local, como por ejemplo en Chile. La gráfica muestra las tasas de interés en pesos chilenos y en dólares, en créditos otorgados por bancos chilenos. Las tasas son mucho más altas en pesos que en dólares.
En los últimos dos años usted hubiera pagado hasta 9 puntos porcentuales más si tuviera sus préstamos en pesos que si los hubiera tenido en dólares. ¿Por qué? Porque los depósitos y los créditos en pesos chilenos tienen el riesgo de ser devaluados. La diferencia entre las dos monedas se vuelve más grande o más pequeña cuando el riesgo sube o baja, pero siempre está allí.
Fuente de datos básicos: International Financial Statistics del FMI.
Esto pasa en todos los países en los que usted puede tomar prestado en pesos o en dólares. Las tasas en dólares siempre son más bajas. Ocuparía demasiado espacio colocar las gráficas de todos los países latinoamericanos que publican las tasas de interés en dólares que prevalecen en sus mercados. Basta otro ejemplo, el de Perú, que se muestra en la gráfica 3, en donde la última diferencia (en septiembre de 2014) es también de cerca de 9 puntos porcentuales.
Fuente de datos básicos: International Financial Statistics del FMI.
A la gente ya se le olvidó pero las tasas de interés eran mucho más altas en colones que en dólares en El Salvador, y, como se ve en la gráfica 4, todas las tasas bajaron con la dolarización. La mayor parte de la gente no hubiera podido comprar casa con las tasas anteriores, y no podrían pagarlas si esas tasas regresaran.
Fuente de datos básicos: International Financial Statistics del FMI.
Ahora vea la gráfica 5, que muestra lo que usted hubiera pagado más en intereses desde que se dolarizó la economía si en vez de pagar las tasas de El Salvador hubiera pagado las tasas de los países no dolarizados de América Latina— entre 10 y 30 puntos. Hubiera pagado 13 puntos de más en todo el período. ¿Qué tanto le representaría eso en el préstamo de su casa?
Fuente de datos básicos: International Financial Statistics del FMI.
Supongamos que usted debe 100 mil dólares al 7,5 por ciento a 20 años y la tasa le sube en 13 puntos, a 20,5 por ciento. Ahora usted estaría pagando 805,59 de cuota mensual de capital e intereses (estaría pagando más por los seguros y otros costos pero eso no es relevante para el ejemplo). Si le sube a lo que ha sido el promedio en América Latina con monedas propias, usted pagaría 20,5 por ciento y tendría una cuota mensual de 1.738,15 dólares, ¡más del doble!
Si lo que usted desea es pagar más del doble por las cuotas de su casa, apoye la idea de tener una moneda propia para que los banqueros centrales jueguen con la moneda tratando de bajar las tasas de interés, porque en América Latina lo que los banqueros centrales han logrado siempre que han tratado de bajarlas es subirlas sustancialmente. Si lo que usted quiere es seguir teniendo las tasas más bajas de América Latina, apoye la dolarización. Pero decida sobre hechos, no sobre palabrerías sin base en la realidad.
Ahora usted ha descubierto la razón por la que se dolarizó. No fue para que circularan billetitos verdes en el país, sino para bajar la tasa de interés para que usted pudiera comprar su casa y las empresas tuvieran menos costos de inversión y dieran más empleo.
Este artículo fue publicado originalmente en El Diario de Hoy (El Salvador) el 25 de enero de 2015.