Por qué los emprendedores se mudan a Florida y Texas

Chris Edwards indica cómo los formuladores de políticas públicas se están dando cuenta de la realidad de la competencia fiscal interestatal.

Por Chris Edwards

Alrededor del 3% de las familias se mudan a diferentes estados cada año en busca de climas más agradables, costos de vida más bajos y otras ventajas. El auge del trabajo remoto está brindando a las personas más flexibilidad sobre dónde ubicarse. Al mismo tiempo, más de 3 millones de personas alcanzan la edad de 65 años cada año y muchas buscan lugares atractivos para jubilarse. 

¿Cómo pueden los estados atraer a los que se mudan de un estado a otro? Los datos del IRS sugieren que las cargas fiscales son uno de los impulsores de la migración. De los 25 estados con impuestos más bajos, 20 disfrutaron de inmigración neta de otros estados en 2020.

Los que más ganan pueden ser particularmente sensibles a las diferencias de impuestos interestatales. Elon Musk aparentemente ahorró 500 millones de dólares cuando se mudó de California con su tasa impositiva máxima sobre los ingresos del 13,3%, a Texas con su tasa cero. Numerosos líderes en finanzas, como Carl Icahn, escaparon de la ciudad de Nueva York y su tasa impositiva máxima sobre la renta del 14,8% y se establecieron en Florida, con su tasa cero.

Los datos del IRS confirman las noticias sobre las personas con mayores ingresos que se mudan a estados con impuestos bajos. Para los hogares con ingresos superiores a $200.000, California pierde dos hogares por cada uno que gana, y Nueva York pierde tres hogares por cada uno que gana. 

Por otro lado, Florida está ganando más de dos hogares con mayores ingresos por cada uno que pierde. Ocho de los nueve estados que no tienen impuestos sobre la renta disfrutan de la inmigración neta de los que más ganan. 

¿Por qué deberían preocuparse los legisladores estatales si los que más ganan se mudan?

Primero, los estados pierden una gran cantidad de ingresos cuando se van los que más ganan. Los datos del IRS muestran que los hogares que ganan más de $200.000 fueron el 7% de las personas que se mudaron de un estado a otro en 2020, pero representaron el 41% de los ingresos de todas las personas que se mudaron. 

Los que más ganan también generan una gran cantidad de ingresos fiscales estatales. En California, el 1% superior de los asalariados paga casi la mitad de todos los impuestos estatales sobre la renta. California trata de recaudar de ingresos con impuestos altos para las personas con mayores ingresos, pero cuando se mudan fuera del estado, pierde todos los impuestos sobre la renta, las ventas y la propiedad que habrían pagado. 

Además, los empresarios a menudo traen sus negocios y trabajos relacionados con ellos cuando se mudan. En Florida, West Palm Beach tiene una industria financiera en auge alimentada por empresarios trasplantados del área de Nueva York. Mientras tanto, Musk está expandiendo Tesla y SpaceX en su nuevo hogar de Texas. 

Los ricos a menudo hacen grandes contribuciones a organizaciones benéficas en sus propios estados, y esos fondos se van con el donante. Musk ha trasladado su fundación benéfica con él a Texas, lo que puede inclinar las donaciones de la fundación a proyectos en ese estado. 

Finalmente, muchos de los que más ganan son ángeles e inversionistas de riesgo en empresas emergentes. Estos inversores brindan orientación y supervisión a los empresarios, por lo que generalmente invierten cerca de casa. Si un estado pierde a los que más ganan, también puede perder fondos para nuevas empresas.

Los formuladores de políticas se están dando cuenta de las nuevas realidades de la competencia fiscal interestatal. Según mis cálculos, más de 20 estados han reducido sus tasas de impuestos sobre la renta en los últimos dos años. El entorno natural les da a estados como Florida una ventaja para atraer residentes, pero los estados del norte como New Hampshire y Dakota del Sur también han generado una inmigración consistente con sus políticas de impuestos bajos. 

Algunos analistas se preocupan por “una carrera hacia el abismo” a medida que los estados compiten para reducir los impuestos. Pero estados como Florida han mantenido sus impuestos bajos al operar sus gobiernos de manera eficiente. Nueva York y Florida tienen aproximadamente la misma población, pero este último brinda sus servicios estatales y locales con un 26% menos de empleados gubernamentales que el primero. 

La gente va a seguir moviéndose. Los formuladores de políticas estatales deben aceptar el desafío y administrar gobiernos moderados, restringir las cargas fiscales y reducir las tasas del impuesto sobre la renta. 

Este artículo fue publicado originalmente en Washington Examiner (EE.UU.) el 25 de septiembre de 2022.