Nuestro enemigo el Estado

Leonor Filardo nos explica la concepción de la ley y el Estado del periodista Albert Nock, como la expuso en su libro Nuestro enemigo el Estado.

Por Leonor Filardo

Con motivo de celebrase el 25 aniversario de CEDICE, su presidente, Rafael Alfonzo fue entrevistado el lunes 4 de mayo en "Alo Ciudadano", donde defendió brillantemente las libertades políticas y económica, condenó lo que en sus diferentes acepciones significa estatismo/mercantilismo/corporativismo/populismo, instrumentado por Venezuela con un rotundo fracaso y presentó una propuesta alternativa basada en la libertad que es la única salida que nos queda y sobre la cual nuestros líderes deben reflexionar.

Para algunos el estatismo versus la libertad son conceptos claros pero nuestros políticos creen que el problema de Venezuela es la falta de líderes honestos y demócratas porque en lo económico su discurso continúa siendo estatista/populista. La claridad de conceptos es primordial a fin de elegir entre dos alternativas distintas. Albert Nock (periodista del siglo XX, gran defensor de la libertad) establece una diferencia entre gobierno y estado en su libro Nuestro enemigo el Estado, esencial para este propósito:

Para Nock, gobierno es cuando la ley está diseñada para proteger la propiedad privada, los derechos naturales de los ciudadanos y maximizar sus oportunidades para que cada individuo logre alcanzar sus metas. Es un instrumento de justicia y elemento indispensable de una sociedad libre.

Estado es cuando la ley la pervierten para castigar a unos y proteger a otros y asegurar beneficios a unos a expensas de otros. Así el estado se convierte en un aparato legal pervertido que por siempre buscará intermediar los medios que lo protejan, con grupos de interés que persiguen sus propios beneficios. Los que pierden son los miembros pacíficos y productivos de una sociedad.

Testimonios históricos indican que el estado se origina en la conquista y la confiscación y su característica única es la explotación económica de una clase por otra: i) En su estado primitivo invaden y confiscan apropiándose de la posesión deseada. ii) Al descubrir que era más rentable hacer la posesión dependiente y utilizarla como medio de trabajo, modificaron la técnica y surgió el estado feudal. iii) En el siglo XVI cuando los mercaderes comenzaron a desplazar a los nobles en el control del estado, no cambiaron su esencia. Sólo adaptaron el mecanismo a sus propios intereses fortaleciéndolo inconmensurablemente. El estado feudal se convirtió en mercantilista, un sistema de privilegio estatal sistemático para servir a un nuevo orden de intereses. Además, se ingenió para convertirse en una maquinaria política de poder, utilizando todas las armas posibles de propaganda que le diera prestigio. El estado mercantilista nació para perpetuarse. Según Nock es antisocial porque parte de los derechos o privilegios que graciosamente otorga a individuos, a los que les entorpece el acceso a la justicia. A su vez, se coloca por encima de ella como autoridad suprema porque es pareja perfecta del absolutismo.

Históricamente lo que ha hecho es crear todas las contingencias para depredar los derechos sociales y fortalecer el poder del estado. Nock cita a Freud quien señala que el estado lo que ha hecho es proteger el monopolio del crimen como sucedió en la Alemania Nazi, en el comunismo de la Unión Soviética y en mayor o menor grado en el mundo contemporáneo. Plantea que en cualquier punto de la historia uno no ve diferencia alguna con los profesionales del crimen. Sólo que ahora se ha legalizado y la justicia adaptada a premiar criminales y castigar honestos.

En su época, analizando el estatismo, condenó duramente el New Deal (un conjunto de políticas que instrumentó el presidente de los Estados Unidos Frankling D. Roosevelt para combatir la depresión económica). Nock asevera que fue el pretexto para incrementar el control sobre la sociedad. Encontraba aberrante que el presidente hubiera conseguido un poder sin precedentes, y lo calificó de golpe de estado. Consideró que las nuevas políticas no serían temporales porque el presidente Roosevelt instrumentó una política monetaria inflacionista que a partir de ese momento sería utilizada permanentemente. En su opinión, conjuntamente con las del New Deal, fueron responsables de la gran depresión.

La naturaleza del gobierno, por el contrario, es genuinamente social porque en base a los derechos naturales fundamentales, el gobierno protege y asegura esos derechos con una justicia que respeta las normas de recto comportamiento individual, de fácil acceso y no va más allá de sus límites. Viva la libertad.