El enigma de Milei
Gabriela Calderón de Burgos dice que el candidato Javier Milei si bien ha sido descrito en la prensa internacional como "ultraderechista", es más bien un liberal o libertario.
Por Gabriela Calderón de Burgos
El domingo pasado se realizaron en Argentina las Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias (PASO). La gran sorpresa la dio Javier Milei, del partido La Libertad Avanza. Una victoria sorprendente: el desencanto con el oficialismo no lo obtuvo el partido tradicional de oposición, Juntos por el Cambio, sino una agrupación política relativamente nueva; las encuestas le asignaban máximo un 20% de la votación y terminó consiguiendo un 30%; triunfó en 16 de los 24 distritos del país y lo hizo con un mensaje liberal frontal. Pero lo que resulta interesante es cómo los medios de la prensa internacional lo han presentado como un candidato de la “ultraderecha”.
En el Wall Street Journal fue descrito como un “outsider” de derecha, un populista y un “conservador social”. El Times de Londres, al igual que el Washington Post, lo describió como el Trump de Argentina. No es novedad que en el mundo desarrollado piensen que en el mundo en vías de desarrollo simplemente les copiamos las modas. No importa que los tres líderes mencionados difieran considerablemente en múltiples opiniones y propuesta de política pública. Para buena parte de la prensa ser de “extrema derecha” o “ultraderecha” es todo aquello que pretende un cambio en una dirección que no sea de izquierda. Por esto debe ser que, para el periodista de El País de España, Federico Rivas Molina, Milei resulta ser “el político argentino inclasificable”.
Cuando aparece un candidato, que se autodefine como liberal o libertario, muchos en la prensa “se han quedado sin lenguaje político para describirlo”, como acusa el economista Juan Ramón Rallo.
Entonces vayamos por las definiciones. En su discurso después de las PASO, así como en múltiples otras expresiones públicas de alto perfil, Milei ha repetido la definición de su mentor Alberto Benegas Lynch (h) —conocido economista liberal clásico en Argentina—del liberalismo: “El liberalismo es el respeto irrestricto del proyecto de vida del prójimo basado en el principio de no agresión, y en la defensa del derecho a la vida, la libertad y la propiedad privada. Sus instituciones fundamentales son los mercados libres de intervención del Estado, la libre competencia, la división del trabajo y la cooperación social”. Esto difícilmente encaja con un conservadurismo social, nacionalismo o, peor aún, fascismo.
Por ejemplo, la propuesta estelar de Milei, la dolarización, aborda un problema que preocupa a la gran mayoría de argentinos: la inflación. Esto es algo a lo que se oponen los nacionalistas que consideran que la moneda es parte de la identidad nacional y los partidarios de la soberanía monetaria. También está a favor de la apertura comercial unilateral.
Puede ser que por su ubicua promesa de promover la prohibición del aborto se haya ganado el membrete de conservador. Pero esto solo es así para quienes ignoran que dentro del liberalismo co-existen posturas pro-vida y pro-aborto. Por otra parte, Milei ha expresado que el matrimonio es un contrato entre dos partes en el cual no debería intervenir el Estado, que la identidad de género es una cuestión personal, que las drogas deberían ser legalizadas.
¿Fascista? Realmente lo que tiene relación directa con el fascismo en Argentina es el peronismo, dado que su fundador se inspiró en Mussolini.
Este artículo fue publicado originalmente en El Universo (Ecuador) el 18 de agosto de 2023.