El gobierno de la turba no es el camino hacia la libertad
Peter Goettler dice que la interrupción de los procesos constitucionales debe ser rechazada de manera categórica en defensa del Estado de Derecho y la Constitución de EE.UU.
Por Peter Goettler
Ayer el congreso fue violentamente interrumpido conforme desempeñaba su deber constitucional. Este fue un ataque directo a la Constitución de EE.UU., al Estado de Derecho y a nuestra república constitucional. Por más de dos meses el Presidente Donald Trump ha afirmado, sin evidencia creíble y a través de múltiples recuentos y casos en las cortes, que ganó la elección presidencial. Como los académicos de Cato y muchos otros han explicado, los intentos del presidente de revertir el resultado de la elección no tienen fundamento legal ni en los hechos. Sus acusaciones de fraude han sido consistentemente rechazadas por las cortes, las legislaturas estatales, los gobernadores y los secretarios de estado, y miembros de ambos partidos en el Congreso.
A pesar de esto, el presidente ha persistido, y muchos miembros del Congreso han hecho eco de sus afirmaciones. Al hacerlo, han ayudado a instigar las llamas de la desconfianza y de la división en maneras que constituyen una profunda amenaza a la libertad, y deben asumir algo de responsabilidad por las acciones que se dieron como resultado de ello.
Nuestro colega Walter Olson escribió en junio, durante las protestas en contra de la violencia de la policía, “No debería ser difícil distinguir entre las manifestaciones pacíficas y legales en búsqueda de causas políticas, por un lado, y la destrucción de propiedad, el asalto, la intimidación, los saqueos y los disturbios, por otro lado”. Eso sigue siendo cierto.
La interrupción violenta de los procesos constitucionales es inaceptable y debe ser rechazada de manera categórica. El gobierno de la turba no es un camino hacia la libertad. Intentar de mantener a la fuerza en el poder a un presidente derrotado ataca el corazón de las provisiones constitucionales que protegen los derechos y libertades de los ciudadanos estadounidenses.
El Instituto Cato desde hace mucho ha trabajado para alentar a las personas en todas partes a entender mejor y apreciar mas los principios de gobierno que están presentes en los documentos fundacionales de EE.UU. Entre estos principios se encuentra la transferencia pacífica del poder luego de haber celebrado elecciones libres y justas. Condenamos estas acciones en los términos más severos, respaldamos el Estado de Derecho y la Constitución, y rechazamos los intentos de revertir los resultados de la elección presidencial de 2020.
Habiendo tenido su oportunidad en las cortes, el presidente debe dejar de cuestionar los resultados electorales y prepararse inmediatamente para la transición. Hacemos un llamado a todos los funcionarios electos a que condenen la arbitrariedad y la violencia y a que se comprometan con la verdad, la Constitución y la transferencia pacífica del poder.
Este artículo fue publicado originalmente en Cato At Liberty (EE.UU.) el 7 de enero de 2021.