Promuevan la revolución de la "banca-móvil"

Por Swaminathan S. Anklesaria Aiyar

La revolución del celular que está transformando al mundo también podría convertirse en una revolución bancaria. En muchos países, los celulares ya son usados en una escala pequeña para realizar depósitos y remesas. Esto podría crecer hasta convertirse en la nueva arquitectura bancaria del siglo XXI.

El potencial más grande para el “banco-móvil”, como se lo conoce, está en India, donde las conexiones celulares están creciendo a una tasa fenomenal de 6 millones al mes. Hasta ahora, las conexiones telefónicas en India han sido en gran parte urbanas. Pero una nueva política ha creado incentivos para que las empresas de telecomunicaciones establezcan torres de celulares en las áreas rurales, en las que 70 por ciento de los indios viven. Dentro de cinco años, los operadores de celulares en India tendrán 500 millones de conexiones.

Los teléfonos celulares pueden crear cuentas virtuales en bancos virtuales. Usted puede ver el balance de su cuenta en su celular y emitir instrucciones a través de los mensajes de texto. La seguridad puede ser garantizada a través de múltiples claves. Hasta los pueblos sin celulares pueden, con el pago de una tarifa, usar los teléfonos de los tenderos locales, quienes están evolucionando, sin astucia, hasta convertirse en cajeros virtuales de los bancos virtuales.

Cuando un cliente paga con efectivo al tendero para recargar su cuenta-móvil, es como si estuviese depositando plata en una cuenta virtual. El cliente puede sacar plata también. Pagando una tarifa, el tendero transferirá dinero de la cuenta-móvil del cliente a la suya, y luego le entregará efectivo al cliente. Esto puede ser extendido al pago de cuentas.

Pero si las empresas de telecomunicaciones de India van a ofrecer servicios formales de banca-móvil, necesitaran la aprobación del Banco de la Reserva de India, el cual se preocupa de que los bancos puedan ser utilizados para el lavado de dinero, y por lo tanto insiste en políticas firmes de “conozca-a-su-cliente”. El Banco de la Reserva ignora las cantidades pequeñas transferidas a través de la red de tenderos, pero hasta ahora no permitirá que las empresas de telecomunicaciones aumenten la oferta de sus servicios y ofrezcan cuentas bancarias formales, depósitos que ganen intereses y otros servicios bancarios.

Como ya lo han hecho reguladores de la banca en otros países tales como Kenya y Sudáfrica, el Banco de la Reserva de India probablemente insistirá para que las empresas de telecomunicaciones formen una alianza con un banco licenciado antes de ofertar los servicios-móviles formales.

Pero el Banco de la Reserva de India tiene una buena razón para fomentar la banca-móvil. Desde hace mucho ha hablado del ideal utópico de un banco para cada familia, aún en las áreas rurales. Esto ha sido un sueño condenado, dadas las limitaciones de la red de sucursales de bancos. Pero la banca móvil podría hacer de ese sueño una realidad, hasta para los habitantes analfabetos. Los analfabetos no pueden lidiar con el papeleo de un banco convencional. Pero pueden depositar y retirar su dinero a través de tarjetas inteligentes que pueden ser recargadas con la ayuda del tendero.

La corrupción que endiabla a los subsidios y a los pagos transferidos a los pobres podría ser reducida si las sumas fuesen depositadas directamente en las cuentas móviles de los beneficiarios. Hoy, gran parte del dinero que es destinado para los pobres no les llega—es robado por burócratas y contratistas corruptos. Las cuentas móviles seguras podrían garantizar que solo los beneficiarios intencionados reciban el dinero.

La operación tradicional de un banco es limitada por el hecho de que la gran parte de la India rural carece de electricidad, y aún los pueblos electrificados muchas veces reciben electricidad solo durante seis a ocho horas durante la noche. Los celulares pueden superar este obstáculo: necesitan muy poca electricidad y pueden ser cargados durante la noche.

Las empresas de marketing rural desde hace mucho han usado baterías cargadas por el sol y con esto obtienen Internet en los kioscos de los centros comerciales. Estas baterías solares pueden cargar los teléfonos celulares durante la noche. Hasta las baterías “tractor” pueden ser conectadas para cargar los celulares. Entonces los celulares podrían proveer la banca virtual a toda la India rural.

Los celulares ya están siendo usados para transferencias de dinero. Millones de indios rurales han emigrado a países vecinos (y al Golfo Pérsico) buscando trabajo, y ellos envían remesas a casa. Pero sus familiares muchas veces son analfabetos y no tienen acceso a los bancos.

Las ordenes de dinero a través del sistema postal llegan a todos los pueblos, pero cuestan mucho. Las transferencias de dinero a través de celular son más rápidas y más baratas que el sistema postal, utilizando la red de los tenderos. Esto sería un buen comienzo, pero necesita ser de mayor escala. Eso significa que las empresas necesitan crear nuevas empresas de banca-móvil, y los reguladores deberían permitírselo.

Este artículo fue publicado originalmente en el San Francisco Chronicle el 29 de julio de 2007.

Traducido por Gabriela Calderón para Cato Institute.