El Índice de Libertad Humana 2016
Ian Vásquez presenta el Índice de Libertad Humana 2016, con datos desde 2008.
Por Ian Vásquez
Ayer lanzamos el Índice de Libertad Humana 2016. Es nuestro segundo informe anual que presenta el estado de la libertad general en el mundo basado en una amplia medición de la libertad personal, civil y económica. Co-publicado por el Instituto Cato, el Instituto Fraser (Canadá) y el Instituto Liberales (Alemania), junto con Tanja Porcnik, mi coautora, examinamos 79 indicadores distintos en 159 países sobre asuntos que van desde la libertad de expresión y asociación hasta las libertades de las mujeres, el grado de intercambio voluntario, la seguridad, el Estado de Derecho y más.
Dado el auge del populismo, el nacionalismo y el autoritarismo en muchos países del mundo en los últimos años, creemos que es cada vez más importante no sólo apreciar el valor inherente de la libertad, sino también apreciar su papel central en el progreso humano. Por esta razón, creemos que vale la pena medir cuidadosamente la libertad.
Abajo podemos ver las 10 jurisdicciones más libres según el ranking. Los Estados Unidos ocupa el puesto 23º. En comparación con 2008 —el primer año para el cual tenemos datos suficientes para un índice robusto— Estados Unidos ha estado en declive; ocupó el puesto 16º ese año. En términos de libertad económica, para la cual tenemos décadas de datos comparables, Estados Unidos ha estado en una disminución de largo plazo desde el año 2000. Sin duda, la guerra contra las drogas, la guerra contra el terrorismo, la expansión de un estado regulador, el surgimiento del capitalismo de amigotes y la erosión de los derechos de propiedad debido al abuso del dominio eminente han contribuido a que Estados Unidos caiga en cuanto al Estado de Derecho y a la libertad humana en general. Desgraciadamente, Estados Unidos no puede más pretender ser el bastión de la libertad del mundo.
Otros países con calificaciones relevantes son Chile (29º), el país más libre de América Latina, y Venezuela (154º), posicionado como el menos libre de la región (no medimos a Cuba debido a la falta de datos fiables). India ocupa el lugar 87º, Rusia 115º y China 141º. Turquía ocupa el 73º lugar, Sudáfrica 74º, Brasil 82º y Egipto 144º.
El nivel de libertad es importante para la prosperidad y el bienestar general. Por ejemplo, el ingreso promedio per cápita de los países del cuartil más libre es de 37.147 dólares, muy por encima del cuartil menos libre (8.700 dólares). Todas las dimensiones de la libertad son importantes y se refuerzan mutuamente. A medida que los países se vuelven más libres y, por lo tanto, más prósperos, los datos sugieren que primeramente tienen niveles relativamente más altos de libertad económica en comparación a las libertades personales. Y que una vez que alcanzan un alto nivel de libertad, tienen niveles relativamente más altos de libertad personal en comparación con los de libertad económica, pero aun así todos los indicadores de libertad son altos. Dicho de otro modo, si desea vivir en un país con un alto nivel de libertad personal, es mejor que tenga un nivel relativamente alto de libertad económica (véase el gráfico siguiente).
También encontramos una fuerte correlación entre la libertad humana y la democracia, la cual la medimos por separado. Respecto a esto, Hong Kong es un caso aislado, y dada la creciente interferencia de Beijing allí, nos preocupa cómo podrá mantener su alto nivel de libertad. Lea la discusión sobre esto y más en el informe completo.
Una versión de este artículo fue publicada originalmente en el blog Cato At Liberty (EE.UU.) el 29 de noviembre de 2016.