Ecuador: No hay presupuesto ajustado sino bien arreglado
Francisco Briones explica cómo cree que el gobierno ecuatoriano ha acomodado las cifras en la propuesta de presupuesto para 2016 para aparentar que en ese año se obtendrá un déficit fiscal mucho menor.
La proforma del Presupuesto General del Estado para el 2016 fue enviada a la Asamblea Nacional el viernes 30 de octubre. El presupuesto inicial para el próximo año asciende a $29.835 millones, lo que significa una reducción del 18% (-$6.482 millones) en relación al inicialmente aprobado para el 2015.
Pero este año en particular la Proforma ha venido bien “arregladita”. Con buen lejos —como se dice en la calle, pues se presenta bien “ajustadita” para quienes se arriesguen a apostar por ella. A continuación algunos puntos de por qué yo “no le haría” por muy arreglada que ande:
1.- ¿Ingresos sobrestimados o reformas tributarias importantes? La proyección de ingresos tributarios de $15.490 millones es prácticamente igual a la de 2015 por lo que percibo una sobrestimación. La recaudación tributaria está muy ligada al crecimiento, si la actividad económica crece hay más impuestos, si se contrae, menos. Pues bien, para llegar a este objetivo, el Gobierno estima un crecimiento económico del 1% a pesar que varias proyecciones independientes prevén una contracción de la economía. Sin embargo, este año la recaudación tributaria alcanzará la meta inicial de $15.566 millones solo gracias a los $1.275 millones adicionales que recibió el Gobierno Central por la amnistía tributaria ($639 millones) y las salvaguardias sobre las importaciones ($636 millones). De lo contrario, la recaudación hubiese sido de a lo más $13.000 millones. De manera que o el Gobierno tiene en planes una importante reforma o medida tributaria, y mantener las salvaguardias por todo el 2016, o en serio piensa que crecerá pese al mal momento económico.
2.- Estimación petrolera también es optimista. Actualmente el crudo ecuatoriano se vende alrededor de $39 por barril, muy cercano a lo pronosticado por el Minsterio de Finanzas ($35). Esto, sumado al escenario optimista de los demás ingresos fiscales, provocaría un déficit fiscal mayor de lo anunciado. La suma de esta situación de riesgo con la anterior (de los impuestos) obligaría al Gobierno a conseguir más financiamiento del advertido o recortar el Presupuesto si no lo consigue.
3.- Se registran ingresos de preventa petrolera, pero no los pagos. El registro de las preventas petroleras es uno de los comodines contables más usados por el Ministerio de Finanzas. Por ejemplo, en el 2013 y 2015 no se registraron en el Presupuesto inicial ni los ingresos ni los pagos por esta modalidad, mientras que en el 2014 solo se registraron los ingresos. Para el 2016, la Proforma incluye $725 millones de ingresos adicionales por venta anticipada de crudo pero ningún registro para el pago a pesar de tener obligaciones de preventa con Tailandia. El registro o no de este tipo de operaciones dentro de la Proforma puede aumentar o reducir la brecha fiscal. En este caso omitir un gasto amplía la brecha. Esta práctica discrecional transgrede un principio contable elemental: no existe deudor sin acreedor por valor equivalente. ¿O en serio no se va a pagar nada de las preventas?
4.- Ajuste mayor es sobre los gastos corrientes. Aunque en reiteradas ocasiones el Presidente y sus Ministros han declarado que el ajuste mayor será sobre la inversión pública, los datos de la Proforma 2016 evidencian otra realidad. El gasto de inversión para el 2016 refleja un recorte de $1.986 millones, mientras que el gasto corriente sería $3.862 millones menos. El ajuste mayor es sobre los Bienes y Servicios de consumo ($3.568 millones) que incluye la importación de combustibles y gastos varios para el funcionamiento del Estado. Mientras que para sueldos y salarios se prevé un ligero aumento de $71 millones hasta $8.790 millones.
5.- El “gran truco” del registro de la importación de derivados. El truco está en dividir el financiamiento de derivados en tres cuentas, dos de gastos corrientes y una de financiamiento. Así, en la cuenta Bienes y Servicios de Consumo se incluyen solamente $2.888 millones de la importación de derivados (quedan $1.788 millones para funcionamiento del Estado). El resto se distribuye en $30 millones en la cuenta de "Otros gastos corrientes" y $1.559 millones en la cuenta "Pasivo circulante", que corresponde a las obligaciones pendientes de pago del ejercicio anterior. Algo no hecho antes. Se me ocurre que sea la importación de crudo que planea (o ya hizo) Petroecuador para producir derivados localmente. La estrategia era una compra con crédito a 12 o 18 meses, que definitivamente sería una “obligación pendiente de pago del año anterior (2015)”.
¿Pero por qué tantos arreglos? El resultado de todo se traduce en un aparente menor déficit fiscal. Eso da buena pinta internacional. El Presidente sabe lo que hace. Porque también dijo que ya tenía ubicado buena parte del financiamiento. Da mensaje internacional de tener financiado lo que requiere para pago de deudas. De los $6.600 millones que requiere financiar ya tiene $4.600, algo más de lo que requiere para el pago de amortizaciones. Va a cumplir obligaciones del Estado (hasta a OXY le quiere pagar). Seguramente espera bajar el riesgo país para a mediados del próximo año buscar deuda.
Por eso creo que no hay Presupuesto Fiscal ajustado sino bien arreglado, y que en el 2016 el déficit será mayor. Yo estimo más de $4.700 millones (Déficit $2.400+Derivados $1.558+Sobrestimación tributaria $800 millones).
Las trampitas con las que se elaboró la Proforma provocarán que en el 2016 se tenga que recortar el presupuesto o requerir más financiamiento del anunciado. Todo dependerá de si el precio del crudo se mejora (Irán va a ingresar al mercado) y de si la economía se contrae o no.