La prohibición mata
Jeffrey A. Miron indica que la prescripción de opioides ha disminuido, al igual que el número de sobredosis atribuidas a los opioides recetados, pero las sobredosis por fentanilo y las sobredosis totales de opioides, han aumentado bruscamente en los últimos años.
Por Jeffrey A. Miron
En los últimos años, múltiples demandantes han acusado a los fabricantes de opiáceos y empresas relacionadas de engañar a pacientes y médicos haciéndoles creer que sus productos son relativamente seguros; esto supuestamente provocó un aumento de la prescripción, la adicción y las sobredosis. La Corte Suprema falló en contra de un acuerdo de 8.000 millones de dólares que otorgaba a los propietarios de Purdue Pharma –los Sackler– protección frente a futuras demandas. La Corte dictaminó que dicha protección no está autorizada por la ley de quiebras.
Es poco probable que estas demandas, independientemente de sus méritos jurídicos, disminuyan la epidemia de sobredosis de opiáceos porque no abordan las políticas gubernamentales que la causaron y la perpetúan.
El riesgo de sobredosis por el uso médico adecuado de opioides con receta es bajo. Como escribí en un análisis político de Cato con Laura Nicolae y Greg Sollenberger:
Las muertes por sobredosis de opiáceos han aumentado drásticamente en Estados Unidos en las dos últimas décadas. La explicación estándar culpa a la expansión de la prescripción y la publicidad de opioides a partir de la década de 1990.
Esta explicación de "más prescripción, más muertes" ha impulsado el aumento de las restricciones legales a la prescripción de opioides. Los gobiernos federal y estatales han promulgado diversas políticas para restringir la prescripción y la búsqueda del médico más adecuado, y el gobierno federal ha llevado a cabo redadas en centros de tratamiento del dolor que prescribían en exceso. Sus partidarios creen que estas políticas reducen la oferta de opiáceos con receta y, por tanto, las muertes por sobredosis.
Sin embargo, este punto de vista tiene poco apoyo. En cambio, sugerimos que la epidemia de opiáceos se debe a que se han impuesto demasiadas restricciones a la prescripción, y no pocas. En lugar de reducir las muertes por sobredosis de opiáceos, las restricciones empujan a los consumidores de opiáceos con receta hacia opiáceos desviados o ilícitos, lo que aumenta el riesgo de sobredosis porque los consumidores no pueden evaluar fácilmente la potencia o la calidad de los fármacos en los mercados clandestinos. La implicación de esta explicación de "más restricciones, más muertes" es que Estados Unidos debería reducir las restricciones a la prescripción de opioides, quizás hasta el punto de legalizarlos.
Los últimos cinco años han confirmado nuestra conclusión de 2019. La prescripción ha disminuido, al igual que el número de sobredosis atribuidas a los opioides recetados. Pero las sobredosis por fentanilo, y las sobredosis totales de opioides, han aumentado bruscamente en los últimos años.
La lección para los responsables políticos es clara: la prohibición mata.
Lemoni Matsumoto, estudiante de la Universidad de Chicago, ha contribuido a este artículo.
Este artículo fue publicado originalmente en Cato At Liberty (Estados Unidos) el 10 de julio de 2024.