La lenta marcha de China hacia una sociedad libre
por L. Jacobo Rodríguez
L. Jacobo Rodríguez fue director asistente del Proyecto de Libertad Económica Global del Cato Institute.
El Congreso de los Estados Unidos votará en los próximos días si permite relaciones comerciales normales permanentes (RCNP) con China. Los que se oponen al establecimiento de RCNP a menudo citan el sistema político no democrático de China así como su economía de mercado socialista como evidencia de que los Estados Unidos deberían sancionar a China en vez de comerciar con ella. Pero realmente no se trata de si China es democrática y capitalista: Claramente, no lo es. Tras viajar recientemente a Guangzhou, una ciudad en el sur de China, quedé más convencido que nunca de los beneficios para los ciudadanos chinos del aumento de los contactos comerciales con los Estados Unidos.
El Congreso de los Estados Unidos votará en los próximos días si permite relaciones comerciales normales permanentes (RCNP) con China. Los que se oponen al establecimiento de RCNP a menudo citan el sistema político no democrático de China así como su economía de mercado socialista como evidencia de que los Estados Unidos deberían sancionar a China en vez de comerciar con ella. Pero realmente no se trata de si China es democrática y capitalista: Claramente, no lo es. Tras viajar recientemente a Guangzhou, una ciudad en el sur de China, quedé más convencido que nunca de los beneficios para los ciudadanos chinos del aumento de los contactos comerciales con los Estados Unidos.
Guangzhou, que tradicionalmente se ha conocido en Occidente como Cantón,
ha sido un puerto comercial desde el tiempo de los romanos. Situado en el delta del Río de la Perla,
siempre ha sido una ciudad abierta al exterior. Sus ciudadanos fueron de los primeros
inmigrantes chinos a San Francisco a mediados del siglo XIX y a la vecina
Hong Kong cuando Mao Zedong ascendió al poder. Cuando comenzó el proceso de reforma en 1978, la provincia de
Guangdong, de la que Cantón es su capital, tomó la iniciativa en seguir
la orden de Deng Xiaoping de "abrirse al mundo."
Hoy en día, Guangdong se ha convertido en un modelo de la globalización, con una especialización muy intensa en la producción de bienes de consumo que no sería posible de no existir un mercado mundial para esos bienes. Por ejemplo, en la ciudad de Guizhen existen más de 1.000 fábricas de lámparas y de bombillas. Las fábricas de ropa y de calzado han desaparecido. Panyu, por el contrario, es el centro de la industria de zapatillas de deporte (zapatillas de diferentes marcas se fabrican en las mismas fábricas). El objetivo es tener un gran mercado para un pequeño producto.
Llegué a Cantón durante la celebración de la Feria China de Productos de Exportación, que se celebra dos veces al año. Todos los productos que China produce para exportar, desde vasos de plástico hasta maquinaria pesada y software, estaban a la venta en la feria, que atrajo no sólo asiáticos, sino también europeos occidentales y orientales, árabes, e incluso latinoamericanos. Es evidente que 20 años de comercio y de contactos continuos con el extranjero ha hecho que los cantoneses sean más prósperos y dependan menos del estado.
Los chinos que hacen esos productos han dejado de ser los sirvientes del Partido Comunista. Por el contrario, satisfacen las demandas de consumidores del mundo entero, y son remunerados apropiadamente. Los arrozales a las afueras de Cantón están siendo reemplazados por edificios de apartamentos y, más impresionante, por viviendas familiares individuales y parques, una señal inequívoca de que está emergiendo una clase media. Incluso en el centro de Cantón, se ven edificios nuevos de apartamentos junto a otros que son viejos, grises, y están decrépitos. La construcción de edificios comerciales y residenciales es bastante común en toda la ciudad.
En el municipio de Nanhai, se ha establecido recientemente un mercado mayorista agrícola, un concepto que es bastante novedoso no sólo para China sino para los países en desarrollo en general. Esta innovación le permite a los trabajadores utilizar la red para traer sus productos al mercado, estableciendo así una clase de mercado virtual, con los vendedores y compradores realizando tratos por la Internet. Por supuesto, el establecimiento de este mercado no habría sido posible si la tierra no se hubiera asignado a familias individuales de agricultores a finales de los años 70, una medida que aumento la eficiencia de la agricultura y contribuyó a la creación de excedentes en la producción agrícola. (Una agricultura más eficiente explica el porqué el gobierno ha permitido que los arrozales sean reemplazados con edificios nuevos de apartamentos y con viviendas familiares individuales.)
El Presidente Bill Clinton tuvo toda la razón al declarar recientemente que, "Cuanto más liberalice China su economía, más liberará el potencial de su gente--su iniciativa, su imaginación, su admirable espíritu emprendedor." El establecer relaciones comerciales normales de manera permanente con China abrirá el camino para que China ascienda a la Organización Mundial del Comercio y beneficiará al ciudadano chino común. El Congreso debería votar "sí" sobre RCNP con China.