Héroes del Progreso, Parte 52: Yuan Longping

Hoy presentamos la entrega No. 52 de la serie de artículos publicados por HumanProgress.org, titulada “Héroes del Progreso”. Esta serie presenta una breve introducción a los héroes que han realizado una contribución extraordinaria al bienestar de la humanidad. La entrega No. 51 trataba sobre Frederick McKinley Jones. 

Esta semana nuestro héroe es Yuan Longping, un agrónomo chino apodado “el padre del arroz híbrido”. A principios de la década de 1970, Yuan desarrolló la primera variante de arroz híbrido de alto rendimiento. Los descubrimientos de Yuan, junto con los avances en la hibridación del trigo en las décadas de 1950 y 1960 por parte de nuestro primer Héroe del Progreso, Norman Borlaug, ayudaron a marcar el comienzo de la Revolución Verde, que redujo la probabilidad de hambruna en la mayor parte del mundo. Dado que el arroz es el alimento básico de aproximadamente la mitad de la población mundial, al aumentar el rendimiento de la planta, el trabajo de Yuan ayudó a salvar millones de vidas. A fines de la década de 1990, el exceso de rendimiento generado por el arroz híbrido de Yuan alimentó a 100 millones de chinos adicionales cada año. Hoy en día, las variedades de arroz de Yuan se cultivan en más de 60 países en todo el mundo. 

Yuan nació el 7 de septiembre de 1930 en Beiping, como se llamaba a Beijing en ese momento. La Guerra Civil China (1927-1949), la Segunda Guerra Sino-Japonesa (1937-1945) y la agitación económica asociada obligaron a la familia de Yuan a mudarse mucho por el sur de China durante sus primeros años de vida. A pesar de una crianza disruptiva, como los padres de Yuan eran maestros, él y sus cinco hermanos recibieron una buena educación. 

En 1949, Yuan terminó la escuela secundaria y comenzó a estudiar en el Colegio Agrícola Suroeste (ahora llamado Universidad del Suroeste) en las afueras de Chongqing en la provincia de Sichuan. La inscripción de Yuan en la universidad coincidió con la victoria del Partido Comunista de Chino en la guerra civil y la consolidación del poder del partido en todo el país. Desafortunadamente para Yuan, quien eligió especializarse en agronomía con un enfoque específico en genética de cultivos, el nuevo liderazgo chino presentó un problema. 

A principios de la década de 1950, había dos teorías principales sobre la herencia. La primera teoría basada en el trabajo de agrónomos soviéticos como Ivan Vladimirovich Michurin y Trofim Lysenko, rechazaba la genética moderna y proponía que los organismos cambian a lo largo de sus vidas para adaptarse a las condiciones ambientales cambiantes. Los defensores de esta idea afirmaron que al modificar las condiciones ambientales de un cultivo (como la temperatura, la exposición a los rayos ultravioleta y las condiciones del suelo), podrían inducir cambios positivos que serían heredados por la descendencia de la planta, produciendo eventualmente mayores rendimientos. 

La otra teoría de la herencia provino de científicos occidentales como Gregor Mendel (a menudo llamado “el padre de la genética”) y Thomas Hunt Morgan. Creían que comprender los genes era esencial para comprender la herencia. Mendel y Morgan propusieron que, si bien un conjunto de genes es específico de cada especie, las variaciones entre individuos de la misma especie son hereditarias (lo que significa que se transmiten de padres a hijos) y ocurren debido a la forma que toma cada gen. 

En ese momento, el gobierno chino buscó en la Unión Soviética casi todos los conocimientos científicos y tecnológicos. Como tal, la teoría soviética de la herencia se consideraba la “verdad” en China. Cualquiera que defienda ideas científicas alternativas podría verse acusado de difundir información errónea y tildado de “enemigo del estado”. 

En la universidad, a Yuan se le enseñó oficialmente la teoría de la herencia defendida por los soviéticos. Sin embargo, fuera de clase, uno de sus profesores, Guan Xianghuan, que rechazó el dogma soviético, enseñó en privado las teorías científicas occidentales de Yuan. Guan alentó a Yuan a realizar experimentos para probar tanto las ideas soviéticas como las occidentales. Si bien la exposición a las ideas occidentales de la herencia sirvió bien a Yuan para su futura carrera, unos años después de ser su mentor, Guan fue etiquetado como enemigo del Partido Comunista por sus “puntos de vista occidentales”. Después de años de acoso por parte del gobierno, Guan se quitó la vida en 1966.

En 1953, Yuan se graduó de la universidad y se le asignó enseñar cultivo de cultivos, fitomejoramiento, genética y ruso en la Escuela Agrícola de Anjiang, una pequeña universidad en la zona rural de Hunan. Durante este tiempo, Yuan realizó experimentos para modificar cultivos utilizando las teorías rusas de la herencia. Sin embargo, cuando no tuvieron éxito, leyó en secreto revistas científicas occidentales sobre ciencia de cultivos y cambió sus experimentos para probar los métodos occidentales. 

A fines de la década de 1950, el trabajo de Yuan sobre genética y mejoramiento de cultivos se volvió mucho más urgente. Entre 1958 y 1960, debido al llamado Gran Salto Delante de Mao Zedong (el líder del Partido Comunista) –que, entre otras cosas, vio al gobierno colectivizar la agricultura– China se sumió en la peor hambruna de los tiempos modernos. En todo el país, decenas de millones morían de hambre, y como Yuan vivía en el campo de Hunan, vio el impacto de la hambruna de primera mano. 

Yuan vio los cuerpos de varias personas que habían muerto de hambre en los bordes de las carreteras. Más adelante en su vida, Yuan recordó: “No había nada en el campo porque las personas hambrientas se llevaron todas las cosas comestibles que pudieron encontrar”. Continuó: “Hambriento, comías cualquier cosa que hubiera para comer, incluso raíces o corteza de árbol … Me volví aún más decidido a resolver el problema de cómo aumentar la producción de alimentos para que la gente común no se muriera de hambre”. 

Después de dos años de estudiar las papas dulces o camotes, en 1960, Yuan pasó a investigar cómo modificar el arroz para crear variantes de mayor rendimiento. Según Yuan, cambió al arroz porque el arroz era el alimento básico de China y porque era más probable que el gobierno apoyara y financiara la investigación del arroz.

En Occidente, la hibridación del trigo y el maíz condujo a grandes avances en la producción de alimentos y ayudó a alimentar a millones de personas. La hibridación de cultivos significa cruzar cultivos genéticamente diferentes para producir descendencia. Gracias a un proceso conocido como heterosis, una planta híbrida suele ser más productiva y puede exhibir mayor biomasa, crecimiento o fertilidad que cualquiera de las plantas progenitoras. Sin embargo, debido a que el arroz es una planta que se autopoliniza, la mayoría de los científicos creían que la hibridación y la heterosis del arroz eran imposibles. 

En 1961, Yuan buscó en los campos de arroz durante meses y finalmente encontró lo que consideró una planta de arroz “sobresaliente” con panículas grandes y granos completos. Yuan recolectó meticulosamente más de mil semillas de este arroz “sobresaliente” y las plantó al año siguiente. Para sorpresa de Yuan, las buenas características de la cosecha madre no se transmitieron a la siguiente generación. 

Como la heterosis solo es obvia en la primera generación de cultivos híbridos, después de un análisis cuidadoso, Yuan concluyó que este arroz “sobresaliente” era un híbrido natural. Este descubrimiento significó que, contrariamente a la sabiduría predominante en ese momento, el arroz podía hibridarse.

A pesar de este importante descubrimiento, uno de los mayores problemas que enfrentaba Yuan era que la hibridación requería diferentes plantas macho y hembra como progenitores. Como el arroz se autopoliniza, si se eliminaran las partes masculinas de la planta de arroz, podrían producirse cruces e hibridaciones cuando las partes femeninas restantes aceptaran polen extraño de otras variedades de arroz. Desafortunadamente para Yuan, el proceso delicado y lento de eliminar las partes masculinas de la planta de arroz hizo que ese proceso fuera poco práctico a gran escala. Esta situación llevó a Yuan a plantear la hipótesis de que si él y su equipo podían encontrar una variedad de arroz con esterilidad masculina mutado naturalmente (es decir, arroz con partes femeninas solamente), entonces esas plantas podrían usarse para hibridar nuevas variedades de arroz. 

En 1964, Yuan y un estudiante pasaron el verano buscando en los campos de arroz estas escurridizas plantas de arroz estériles masculinas mutadas naturalmente. En un artículo de 1966 en el Chinese Science Bulletin, Yuan informó que encontró seis cultivos de arroz individuales que tenían potencial para la hibridación. 

Sin el conocimiento de Yuan, esta publicación de 1966 probablemente le salvó la vida. En ese momento, la Revolución Cultural estaba en plena vigencia en toda China. En su universidad comenzaron a aparecer carteles que denunciaban a Yuan como contrarrevolucionario, y los funcionarios locales hicieron planes para encarcelarlo. El estado incluso le reservó un lugar en el “establo”, un lugar en la prisión local para intelectuales disidentes. Afortunadamente, al leer su publicación sobre el arroz estéril masculino mutado naturalmente, el director de la comisión nacional de ciencia y tecnología y otros líderes provinciales y nacionales enviaron una carta de apoyo a la universidad a favor del trabajo de Yuan. Después de la carta, a Yuan se le permitió continuar con su trabajo e incluso se le proporcionó un mayor apoyo financiero. 

A pesar de tener las seis plantas de arroz con esterilidad masculina mutadas naturalmente sobre las que escribió en su artículo de 1966, Yuan descubrió que cuando estas plantas con partes femeninas únicamente se hibridaban usando polen de otras variedades de arroz, sus rasgos de esterilidad masculina no se transmitieron a su descendencia. Si Yuan no pudiera encontrar una manera de garantizar que la descendencia del arroz hibridado transmitiera solo partes femeninas (es decir, era estéril), haría que la hibridación generalizada fuera extremadamente poco práctica. Dado eso, Yuan y su equipo comenzaron a buscar variedades silvestres de arroz con esterilidad masculina, que Yuan pensó que podrían exhibir material genético más prometedor. 

En 1970, junto a una vía férrea en Hainan, por fin, Yuan descubrió una planta de arroz silvestre con esterilidad masculina a la que los científicos se refieren como “abortiva silvestre”. Poco después de este descubrimiento, Yuan publicó un artículo que describía cómo el material genético del arroz silvestre con esterilidad masculina podría potencialmente transferirse a cepas comerciales de arroz. Yuan planteó la hipótesis de que si eso sucediera, la descendencia de la planta seguiría siendo androestéril y que las cepas comerciales de arroz altamente endogámicas del mundo podrían hibridarse para producir mayores rendimientos. 

En 1973, Yuan comenzó a cosechar la descendencia del arroz “abortivo silvestre”. Para deleite de Yuan, la descendencia estaba compuesta por decenas de miles de plantas de arroz con esterilidad masculina. A fines de la década de 1970, el arroz híbrido de Yuan tenía rendimientos entre un 20% y un 30% más altos que las variedades comerciales tradicionales. 

El descubrimiento del arroz híbrido de alto rendimiento ayudó a aliviar la inseguridad alimentaria no solo en China sino en países de todo el mundo. Al hacerlo, el arroz de Yuan salvó millones de vidas. 

A lo largo de la década de 1980, Yuan donó sus principales variedades de arroz a varios agrónomos y organizaciones nacionales e internacionales. Él y su equipo capacitaron a los agricultores e introdujeron sus cepas híbridas en más de 80 países en todo el mundo. 

Para 1991, las Naciones Unidas encontraron que el 20% de la producción mundial de arroz provenía del 10% de los campos de arroz del mundo que cultivaban el arroz híbrido de Yuan. En 1999, se descubrió que solo en China, los aumentos de producción provocados por el arroz híbrido alimentaron a 100 millones de personas adicionales cada año. Hoy en día, una quinta parte de todo el arroz cultivado a nivel mundial se origina en los híbridos de Yuan. 

Más adelante en su vida, Yuan se convirtió en una especie de celebridad nacional en China y fue elogiado ampliamente por el gobernante Partido Comunista. Sin embargo, algo bastante inusual para alguien de su prominencia, nunca se involucró en política ni se unió al Partido Comunista. 

Yuan recibió decenas de premios nacionales e internacionales. En 2000 recibió el Premio UNESCO de Ciencias y en 2004 el Premio Mundial de la Alimentación. Cuatro asteroides, un planeta menor y una universidad en China llevan su nombre. 

A lo largo de su vida, Yuan siguió trabajando para que sus variedades híbridas fueran aún más productivas. Estos avances incluyeron el cruce de arroz con maíz para que fuera más nutritivo y el enriquecimiento del arroz con vitamina A para ayudar a mejorar la vista de las personas. Incluso en 2018, a la edad de 87 años, Yuan y su equipo crearon una variedad de arroz híbrido que podía crecer en suelos ricos en sal, lo que ayuda a los agricultores que viven cerca de la costa. Yuan murió el 22 de mayo de 2021 en Changsha, Hunan. En los días posteriores a su muerte, miles de dolientes colocaron flores y tazones de arroz hervido afuera de la funeraria. 

Al desarrollar la primera variante de arroz híbrido de alto rendimiento, el trabajo de Yuan ha mejorado la estabilidad alimentaria del mundo. A pesar de la feroz resistencia política al principio de su carrera y de los críticos que creían que la hibridación del arroz era imposible, Yuan perseveró y demostró que los detractores estaban equivocados. Como resultado, ha salvado millones de vidas y millones de personas comen el arroz híbrido de Yuan todos los días. Por estas razones, Yuan Longping es nuestro quincuagésimo segundo Héroe del Progreso. 

Este artículo fue publicado originalmente en HumanProgress.org (EE.UU.) el 7 de septiembre de 2022.