Héroes del progreso, parte 40: Jeremy Bentham

Alexander C. R. Hammond destaca el trabajo de Jeremy Bentham, el filósofo inglés del siglo 18, pensador de la Ilustración y reformador social.

Por Alexander C. R. Hammond

Hoy presentamos la parte No. 40 de una serie de artículos publicados por HumanProgress.org titulada “Héroes del Progreso”. Esta columna provee una introducción breve a los héroes que han realizado una contribución extraordinaria al bienestar de la humanidad. Puede encontrar la parte No. 39 de la serie aquí

Esta semana, nuestro héroe es Jeremy Bentham, el filósofo del siglo 18, pensador de la Ilustración y reformador social. Bentham es considerado como el fundador del utilitarismo —una filosofía que sostiene que la opción más ética en cualquier situación es aquella que producirá el mayor bien para el mayor número de personas. A lo largo de su vida, Bentham abogó por muchas causas, incluyendo la separación de la Iglesia y el estado, las libertades económicas e individuales, el voto de las mujeres, el derecho al divorcio, la despenalización de la homosexualidad y la libertad de expresión. También es ampliamente considerado como uno de los primeros defensores de los derechos de los animales.

Aunque el impacto del trabajo de Bentham fue relativamente pequeño durante su propia vida, inspiró a un sinnúmero de otros pensadores y políticos que tuvieron éxito implementando una serie de reformas sociales importantes. 

Jeremy Bentham nació el 15 de febrero de 1748 en Londres en el seno de una familia rica. Se dice que era un niño prodigio. A los 3 años, empezó a estudiar Latín. Para cuando tenía siete años, era mostraba talento tocando el violín y regularmente presentaría sonatas de Handel en reuniones sociales. Como niño, Bentham asistió a la Escuela Élite Westminster. A sus 12 años de edad, se fue a estudiar derecho en la Universidad de Oxford. 

Bentham completó su título de bachiller en 1763, a sus 15 años. Completó su título de maestría tres años después. Aunque fue llamado a la asociación de abogados en 1769, Bentham nunca ejerció el derecho. Durante su tiempo en Oxford, Bentham encontró que tenía poco respeto por las complejidades del derecho inglés. En cambio, decidió pasar su tiempo intentando reformarlo. 

Gracias a la riqueza de su familia, Bentham podía dedicarse a sus intereses intelectuales a tiempo completo. El primer libro de Bentham, titulado Fragment on Government, fue publicado en 1776. El libro se enfocaba en gran medida en rechazar el trabajo de Sir William Blackstone Commentaries on the Laws of England, que buscaba sentar la base legal de la constitución inglesa. Bentham rechazaba los tratados del famoso jurista, afirmando que Inglaterra “debería librarse de las ataduras de la autoridad y de la sabiduría ancestral en el campo del derecho”. En cambio, Bentham argumentó, el derecho debería estar basado en el principio de la utilidad.

Bentham una vez señaló que la desigualdad de los hombres y las mujeres ante la ley le hizo elegir una carrera como reformador desde una edad temprana. Como tal, sus trabajos muchas veces abogaban por la igualdad completa de los sexos. En 1785, Bentham argumentó a favor de la abolición de las leyes que prohibían la homosexualidad. Aunque el ensayo permaneció sin ser publicado durante la vida de Bentham (probablemente por miedo a ofender la moralidad pública), sigue siendo uno de los primeros argumentos a favor de la legalización de las relaciones entre personas del mismo sexo.

En una visita en 1785 a Rusia, Bentham escribió su primer ensayo acerca de economía, titulado “En defensa de la usura”. El ensayo muestra Bentham sostenía postulados similares a aquellos del economista escocés Adam Smith quien es comúnmente considerado como “el padre de la economía clásica”. En el ensayo, Bentham argumentó en contra de una economía planificada y afirmó que cada individuo era el mejor juez de su ventaja. Sin embargo, discrepaba con Smith en que él creía que las tasas de interés deberían flotar libremente, en lugar de ser fijadas por un cuerpo estatal. Los trabajos posteriores de Bentham acerca de filosofía política en gran medida siguieron una visión laissez faire

En 1789, Bentham publicó uno de sus libros más exitosos, titulado “Una introducción a los principios y la moral de la legislación”. La publicación es muchas veces considerado el trabajo teórico más importante de Bentham. Era en ese trabajo que Bentham desarrolló su teoría del utilitarismo. Bentham sugirió que la humanidad estaba gobernada por dos motivaciones principales: el dolor y el placer. El objetivo de toda legislación, por lo tanto, debería ser asegurar “la mayor felicidad para el mayor número posible”. Habiéndose inspirado en Cesare Beccaria, nuestro Héroe del Progreso No. 38, Bentham creía que el castigo debía ser utilizado solo “hasta donde se había prometido para excluir algún daño adicional”.

Bentham creció en un hogar conservador (Tory), pero sus opiniones acerca del gobierno representativo se apartaron del conservadurismo tradicional. En 1809, escribió A Catechism of Parliamentary Reform. El estudio proponía elecciones anuales, el voto secreto, y un universo de electores más amplio que incluya a las mujeres, así como también la libertad para que las mujeres participen en el gobierno. 

En 1823, Bentham co-fundó The Westminster Review con su estudiante James Mill (el padre del importante liberal clásico John Stuart Mill). La publicación fue descrita como una revista para “los filósofos radicales”. Este grupo de discípulos de Bentham llegarían a influir de manera importante en la vida pública inglesa.

En uno de sus trabajos posteriores, que fue publicado como una carta al editor del Morning Chronicle en 1825, Bentham adoptó la causa de los derechos de los animales. Bentham argumentó que, con respecto a la tortura sin sentido o a infligir dolor, la “línea insuperable” no debería ser la capacidad de razonar, sino la capacidad de sufrir. Él argumentó que si la capacidad de razonar era el único criterio según el cual los derechos eran atribuidos, entonces los infantes humanos (o las personas con ciertas discapacidades) podrían no satisfacerlo. Sin embargo, Bentham si dejó claramente establecido que los animales podían ser matados para obtener alimento o en defensa de la vida humana (considerando que el animal no sufra de manera innecesaria).

El 6 de junio de 1832, Bentham murió en su hogar en Westminster, Londres. Tenía 84 años. Bentham continuó escribiendo hasta un mes antes de su muerte. Dejó instrucciones detalladas para que su cuerpo sea diseccionado, y luego conservado cuidadosamente y exhibido. Los deseos de Bentham se cumplieron; hasta el día de hoy, su cuerpo sigue en exhibición en el Centro Estudiantil de la University College en Londres. 

Jeremy Bentham fue una de las figuras más importantes de la Ilustración Inglesa. Aunque sus trabajos no condujeron a reformas legislativas durante su propia vida, muchas de las ideas de Bentham tuvieron un impacto enorme conformando alrededor del mundo el desarrollo de legislación racional basada en la utilidad. El trabajo de Bentham ha ayudado a darle forma a un mundo más humano. Es por esta razón que Jeremy Bentham es nuestro Héroe del Progreso No. 40.

Este artículo fue publicado originalmente en HumanProgress.org (EE.UU.) el 19 de marzo de 2020.