Generalmente se piensa que la Escuela Austriaca de Economía es una ideología. Martin Krause aclara este concepto que situa a la misma como un conjunto de teorías útiles que permiten explicar los acontecimientos de orden económico que están ocurriendo en el mundo. Esta discusión es amplia y continúa siendo tema de debate entre algunos economistas. Sus fundadores, entre los que destaca principalmente la figura de Carl Menger se basan en tres fundamentos básicos que son: la subjetividad del valor, la dispersión de conocimiento y el orden espontáneo los cuales son factores de gran importancia porque permiten interpretar el comportamiento humano y la forma como se dan las valoraciones entre las personas.