David Boaz dio a la libertad un futuro brillante

David J. Bier conmemora la importante contribución de David Boaz a la defensa de la libertad.

Por David J. Bier

Casi nadie ha tenido un mayor impacto en mi vida que David Boaz. Ni siquiera podía pronunciar correctamente su nombre cuando lo conocí, pero mientras crecía, David "Bo-az" era la última palabra en política. Sus libros y artículos, en los que aplicaba los principios de la Declaración de Independencia a los problemas de la América moderna, llenaban nuestras estanterías.

Sin él, nunca habría oído hablar del Instituto Cato, ni habría imaginado una posición política libertaria. Siendo la única luz en un mundo de tinieblas políticas tras el 11-S, los escritos de Boaz y Cato –que eran sinónimos en mi mente– fueron la razón por la que abandoné mi sueño de ser ingeniero para dedicar mi vida a la política. Podría haber sido un libertario, en algún lugar, haciendo algo, pero habría sido una versión empobrecida sin la profundidad, la alegría y el optimismo del libertarismo de Boaz. 

El primer correo electrónico que me envió tras contratarme fue una escueta corrección de mi formato de las elipsis, pero por muchos errores que cometiera en Cato, sé que evitó muchos más. La mera existencia de Boaz en Cato era un recordatorio constante para elevar tu trabajo a la altura de sus estándares y recordar el propósito más profundo de por qué escribimos: no por citas o clics, ni siquiera por curiosidad académica, sino para representar respetablemente la causa de la libertad. 

Cuando pienso en el efecto que ha tenido y seguirá teniendo en mi vida, no puedo evitar pensar en todos los millones de personas a las que ha afectado y que nunca trabajarán en Cato, pero que, sin embargo, seguirán llevando la antorcha de la libertad. Hace poco recibí un correo electrónico en el que me daban las gracias por haber escrito The Libertarian Mind. ¡Ojalá! Pero el error me motivó a abrirlo y leer de nuevo la conclusión de David: "El libertarismo no es sólo un marco para la utopía, es el marco indispensable para el futuro".

Bien dicho, como siempre. Y creo que nadie puede afirmar haber hecho más para que ese marco tenga un futuro brillante que David Boaz. 

Este artículo fue publicado originalmente en Cato At Liberty (Estados Unidos) el 7 de junio de 2024.