Cuba: A una colega
Siempre me dirijo como periodista a los medios oficiales, atacando su manipulación, y ayuntamiento con el gobierno cubano. Hoy me refiero a la gran mentira que mi estimada colega Milenis Torres desde hace varios días trasmite por los medios que Raúl Castro le brinda en la televisión cubana y también al artículo que ella publica sobre la prensa independiente y la difícil y noble tarea que nosotros tenemos de brindar la información al público nacional e internacional:
En su artículo explica las condiciones y situaciones que los periodistas debemos rebasar o afrontar dependiendo de los sucesos.
Como usted lo dice, realmente es difícil. Solo discrepo con usted en una cosa muy primordial y es en que olvida de que para ser un verdadero periodista hay que armarse de valor y no depender de comunicar solo lo que a un gobierno convenga.
La realidad cubana de hoy está fuertemente posibilitada para comunicar eventos, hechos, tragedias y demás que merecen convertirse en noticias.
Por ejemplo, los cientos de prisioneros políticos que se encuentran en las cárceles del gobierno por el simple hecho de no compartir el ideal comunista de los hermanos Castro; los jóvenes y sus malísimas proyecciones culturales y formales en sentido educativo y moral; la crisis económica; las expresiones del descontento político popular; el olvido oficial de cuestiones importantes para la vida y el desarrollo nacional; la represión y el militarismo en las calles. Esto se ve a diario por ahí, la policía que a cada seis pasos le pide a uno el carnet de identidad.
Pero lo que es peor es el silencio cómplice de los medios informativos cubanos con el régimen de gobierno. Estos medios comunican un desarrollo y una conformidad política totalmente inexistentes.
Se que no es fácil, humanamente. Se que usted y sus colegas, sobre todo los que hacen trabajo de campo no tienen la posibilidad de emitir un reportaje tal y como lo conciban, pues a la hora del despacho, el editor quitara las partes que considere nocivas o peligrosas y que el gobierno no admitirá jamás difundir. Por eso usted y sus colegas de la prensa oficialista deben de dar rodeos o tratar muy superficialmente la comunicación de algún evento ya que de ahondarlo podrían perder el trabajo e ir a la cárcel.
Es por esto, estimada colega, que desde su punto de vista nuestro trabajo se ve tan complicado y es de su conocimiento la valentía que tenemos al decir la verdad al mundo sobre nuestra realidad.
Me imagino que, como yo, usted también se sienta frente al televisor aunque sea una vez al día. ¿Le llamaría usted periodismo eficiente al que realizan los reporteros del noticiero de la televisión cubana, esos que muestran al mundo en ruinas y a Cuba como el único país que sobreviviría el fin de la humanidad por ser comunista y tener como dirigente a alguien de la familia Castro? ¿Le llamaría usted noticia a lo que publica el diario oficial Gramma, diario que desde su creación su labor a sido transmitir los logros de una revolución fantasma y que ahora presta sus páginas para la irreflexión de un anciano en vez de mantener al pueblo informado de lo que realmente acontece? Y así te los pudiera mencionar todos, todos los medios de comunicación que se dedican a crear la imagen falsa de una Cuba que solo existe en la mente de los del partido comunista.
Los periodista independientes no somos enemigos, sino todo lo contrario, somos la prueba de que un mundo con mas libertad de expresión y de prensa para los cubanos también es posible, por eso la emplazo a que cuando desee me realice una entrevista real y yo con mucho gusto le explicaré nuestro trabajo. Así no tendrá la necesidad de mentir.