¿Mercado o Estado?

Pedro Cateriano reseña el libro de Lorenzo Bernaldo de Quirós y Jordi Sevilla, "Mercado o Estado", en el que se analiza desde dos ópticas distintas (la de un liberal y la de un socialista) la crisis financiera y sus consecuencias.

Por Pedro Cateriano

La actual crisis económica ha motivado —entre muchas reacciones— que se discuta nuevamente el rol que el Estado debe cumplir en el campo económico, y las fallas que supuestamente genera el libre mercado.

España no es ajena a este debate y por ello resulta oportuna e ilustrativa la publicación del libro que Jordi Sevilla y Lorenzo Bernaldo de Quirós, titulan: “Mercado o Estado”.

Es de destacar el hecho de que frente a un tema tan crispado, dos intelectuales hayan decidido discrepar académicamente, gesto que indudablemente contribuye a la democracia española, y enriquece la confrontación de ideas.

Desde ópticas diferentes, un socialista y un liberal, analizan la raíz de la crisis económica y sus consecuencias, Lorenzo Bernaldo de Quirós defiende el papel del mercado dentro de una economía libre y Jordi Sevilla destaca la importancia de la intervención del Estado en la economía.

Parapetados en posiciones opuestas e irreductibles, los coautores discrepan sobre los factores que ocasionan esta feroz hecatombe económica, que afecta al mundo y que varios países de Europa, aún no la enfrentan con determinación.

La izquierda moderna de hoy, en la mayoría de las democracias, ha comprendido que el socialismo, entendido como economía estatizada y dictadura política, es impracticable, porque sólo genera pobreza y pérdida de la libertad. La prueba más concluyente, la acaban de dar los sucesivos gobiernos de la Concertación en Chile, país que tal vez tiene los socialistas más modernos, económicamente hablando. Lo que hay que criticarles a éstos, es sus incomprensible coqueteo, con la abusiva dictadura de los hermanos Castro en Cuba.

Jordi Sevilla parece que es uno de esos socialistas modernos, pero no se acerca, por ejemplo, al criterio de los socialistas chilenos. Él es un ferviente devoto del Estado y no del mercado. Cree en lo público y no en lo privado. Critica la globalización, y señala que ésta debe ser gobernada.

Lorenzo Bernaldo de Quirós, en cambio, va contra la corriente y enfatiza que la crisis se ha convertido en un pliego de reclamos contra la economía de libre mercado.

Cuando se afirma que la democracia no es una forma de gobierno perfecta, sino que es la menos mala, este mismo criterio lo deberíamos utilizar explicando el papel que juega el mercado, dentro de una economía libre.

El mercado no es perfecto ciertamente, pero es menos malo y dañino como mecanismo económico, si lo comparamos con las economías planificadas, que están basadas en la intervención estatal.

Bernaldo de Quirós sostiene que el hundimiento registrado por la economía de España desde 2008 y el fracaso social keynesiano en reactivarla, abre una oportunidad de oro para aplicar un reformismo liberal.

Sin duda ha llegado la hora de tomar las decisiones, por más duras e impopulares que éstas sean. El miedo no debe detener la drástica reforma económica, que España requiere.

Ojalá se emprenda la reforma del Estado, tantas veces postergada y no deseada por los defendores del estatismo. ¿Es mejor esperar la quiebra de éste, para iniciarla? Los que queremos el bien de España, pensamos que no.

Este artículo fue publicado originalmente en El Imparcial (España) el 3 de mayo de 2010.